DEFICIENTE GESTIÓN SANITARIA

    
     Nos hemos hartado de escuchar del propio gobierno y su propaganda mediática que el mal de la pandemia en España viene de los recortes en sanidad en los años de gobierno del PP. 

     También propagan que la sanidad pública representa un óptimo de eficacia porque un servicio de calado no debe estar en manos privadas, no se debe hacer negocio con la salud.

     Por decir que no quede y por acusar para quitarse la responsabilidad de la acción gubernamental, mejor que mejor si es a la derecha.

     Es bueno citar números y hechos de la sanidad en algunos países para dar suspenso a los bulos con los que el gobierno alimenta a una población desabastecida de información.

     Una sagaz proclama de propaganda es la de afirmar que la sanidad necesita más presupuesto para combatir cualquier eventualidad. Recuerda el gobierno que un Estado cuanto más grande, más fuerte. Sin embargo, la ratio gasto público y eficiencia no cuadra la ecuación gubernamental:
Gasto Público Corea del Sur......... 30,5 % del PIB
G.P. Singapur  ..............................  15 % del PIB
G.P. Francia   ...............................   57 % del PIB
G.P.  España  ................................   44 % del PIB

     Con esta comparación conviene recordar los contagios y las muertes causadas por el virus corona:
Corea del Sur
     Contagios ............ 10.936
     Muertes  ..............  258 (5 por millón)
Singapur
     Contagios ............ 24.671
     Muertes    ............. 21 (3,5 por millón)
Francia
     Contagios  ............ 140 mil
     Muertes    .............  26643 (398 por millón)
España
     Contagios  ............ 228 mil 
     Muertes   ..............  26.920 (575 por millón)

     Nada tiene que ver el tamaño del Estado con la eficacia del gasto.
     Otro dato es el de la dualidad sanidad pública-sanidad privada, mostrando una clara animadversión contra la privada sin razón alguna que justifique una mejora de la atención, como si España fuese la que mejor servicio sanitario ofrece. Veamos algunos datos referidos a camas hospitalarias privadas del país: 
Holanda el 100 % es privado
Alemania el 59 % son camas privadas
España el 31,4 % también son camas de hospitales privados

     Sin embargo España sigue ofreciendo los peores ratios en cuanto a eficacia de resultados.

     Así pues, no es el gasto público lo que determina el mejor o peor sistema sanitario, ocurre los mismo con la educación. 

     ¿Gastar más o mejorar el sistema? 

     Sea la sanidad mantenida con fondos públicos o privados, sea financiada por recursos públicos o privados, es la gestión del proceso lo que puede llevar al éxito o al fracaso.
     Detengámonos en la eficiencia de una buena gestión sanitaria, que se gaste lo necesario para obtener el mejor resultado, no en la propaganda política a todas luces falsa, de que para lograr la mejor eficacia sanitaria hay que dotar a la sanidad con un gran presupuesto. 

     La politización de la sanidad tiene presencias y ausencias interesadas. Hace unos años hubo manifestaciones de las mareas blancas, en referencia a las batas, por recortes en la sanidad, decían (el gasto sanitario no hizo más que subir) y promoción de la sanidad privada. Sin embargo, en dos meses de estado de alerta, con deficiencia de material sanitario para prevenir el contagio, la inutilidad de muchos test diagnóstico servidos a destiempo, todo tan corriente en aquel principio de horrendo recuerdo, sigue en parte sin encontrar solución para evitar contagios y reconocer a los portadores del virus. Es el caso que los sindicatos han brillado por su ausencia en abordar el déficit de gestión de la sanidad.