Cabañuelas

Estamos en Agosto, mes de las cabañuelas.
Son las cabañuelas un método ancestral usado por agricultores y ganaderos para predecir el tiempo a largo plazo. Se observa la dirección e intensidad del viento, la humedad de la mañana, la aparición de nubes y su formación, la lluvia y el granizo, etc. Es decir, con los fenómenos de la meterología que suceden a diario se aproxima el tiempo que hará en meses sucesivos.
En esta zona del Mediterráneo donde a períodos de gran sequía suceden inundaciones, el agua de lluvia ha sido el factor limitante más importante en el desarrollo de los cultivos, por lo tanto de gran importancia para el agricultor para elegir la época de siembra de cultivos herbáceos o el abonado de fondo durante el invierno.
Quién no conozca la agricultura y sus agricultores les adelanto que la práctica agrícola está basada mucho en la costumbre aprendida de padres a hijos y en las creencias que le dan categoría de mito a ciertas prácticas. Por ejemplo, realizar la poda del árbol cuando la luna mimba o mengua, igual que la monda de las viñas o el adobo de las aceitunas, etc. Las cabañuelas representan la predicción del tiempo que hará despues de varios meses de la observación. No tienen base estadística, por tanto científica, como no la tiene observar que un gato se lave la cara para predecir lluvia inminente.
Unos dicen que la meteo del 1 de agosto corresponde al tiempo que hará en Enero del año siguiente, el día 2 a Febrero y así hasta el 12 que representa Diciembre, para luego seguir las "retorneras" pero en sentido inverso: el 13 vuelve a corresponder a Diciembre, el 14 a Noviembre, y así hasta el 24 que vuelve a Enero del mismo año. Para otros el meteo del 1 de agosto es el tiempo de todo ese mismo mes, el 2 será el de Septiembre, hasta el 12 que corresponde a Julio y luego retornar como en las anteriores acabando el 24 de nuevo con Agosto.
Mi pequeña experiencia con los labradores de la zona me lleva a concluir que es una manera de mantener en la predicción la necesaria esperanza que necesita el agricultor para seguir luchando en un trabajo cuyo futuro es más incierto que cualquier otro, sobre todo cuando el año ha estado marcado por la ausencia de lluvias.
Mucha es la gente que sigue el método cabañuelas, aportan experiencia y conclusiones que han alimentado dichos y refranes populares que enriquecen la lengua hablada.
Siempre quedará un resquicio en nuestras mentes para creer que la costumbre sigue siendo el alimento donde se cimente una posibilidad, pero que la razón y la ciencia deben demostrar.
Esta explosiva sensación que tiene Gene Kelly cantando bajo la lluvia es la que experimentamos en el campo cuan cae la deseada lluvia. Si no se lo creen, vengan a los arrabales y extramuros de la ciudad y comprobarán con qué gusto recibimos la lluvia.

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